EX COMBATIENTES DESMIENTIERON AL MINISTRO

Ya se le puede caer la cara de vergüenza a Puricelli...
Ex combatientes de Malvinas de Rosario desmintieron hoy las versiones del Ministro de Defensa Arturo Puricelli y revelaron que existían intenciones de la Armada de entregarle el buque misilístico a la ciudad por el bicentenario de la batalla de San Lorenzo


Puricelli complicado por declaraciones de ex combatientes

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CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).-Ex combatientes de Malvinas desmintieron la versión del ministro de defensa de la Nación, Arturo Puricelli sobre el destino de desguace del buque misilístico Santisima Trinidad que se hunde en Puerto Belgrano y revelaron que autoridades de la Armada habían prometido la entrega de la histórica nave de guerra a la ciudad de Rosario antes que se convirtiera en chatarra.

Puricelli, fiel a la tradición kirchnerista de victimización, no descartó ayer (22/01) un sabotaje y este miércoles 23/01 agregó que “A mí se me cae la cara de vergüenza de decirle a la presidenta (Cristina Kirchner) que se hundió un buque que estaba amarrado en el puerto. Esto tiene que tener una explicación muy sólida".

"No tiene mantenimiento porque es un buque que va a desguace, que va a ser chatarra",aclaró el funcionario acerc a del destino previsto para el buque.

Sin embargo, también este 23/01 los ex combatientes de Malvinas de la Ciudad de Rosario desmintieron las declaraciones del ministro y dijeron que la Armada les había prometido que el Santisimo Trinidad sería un regalo, antes de convertirse en chatarra.

Según el presidente del Centro de Ex Combatientes, Rubén Rada, la Armada Argentina había manifestado la intención de regalar el buque a la ciudad de Rosario con motivo del bicentenario de la Batalla de San Lorenzo

Rada informó que las conversaciones con el Almirante Carlos Paz, ex Jefe de Estado Mayor General de la Armada(que fue apartado tras el conflicto de La Fragata Libertad, ver nota relacionada) ya habían sido iniciadas entre las autoridades nacionales y las locales a fines del año pasado.

De acuerdo a Rada, la intención de Paz era regalarle a la ciudad el buque Santísima Trinidad: “Me dijo que como Buenos Aires tenía la Fragata Sarmiento, podíamos nosotros tener el buque”. Y recalcó que Paz dijo “Antes de que pase a desguace te lo entrego”.

Rada remarcó que le habían informado que según las autoridades nacionales: “Tenerlo amarrado sale unos 250 mil pesos al año”.

Las conversaciones se iniciaron, pero después de los hechos que tomaron trascendencia como La Fragata Libertad, las fiestas de fin de año y el inicio de las vacaciones “todo quedó trunco”.

Rada, quien no se dió por vencido y consideró que, a pesar del hundimiento, podría ser traído a la ciudad. Incluso manifestó que en febrero renovaría las gestiones para el traslado.

Finalmente, reflexionó: “Este buque hizo punta de lanza en Malvinas. Nos pasa esto con un montón de cosas, las perdemos, las rompemos y después nos arrepentimos”.

El buque tuvo una corta pero intensa vida operativa, ya que operó efectivamente solo 8 años. Su última navegación operativa fue en junio de 1989, cuando por el embargo británico posterior a la Guerra de Malvinas, comenzó a ser canibalizado para que su gemelo, el D-1, continuase operativo.

Tambien se conocieron veriones de que existían intenciones de transformar al ARA Santísima Trinidad (D-2) en un museo flotante sobre la Guerra de Malvinas.