El nuevo presidente de la Comisión Nacional de Ex Combatientes de Malvinas, Ernesto Alonso, destacó que, a 30 años de la guerra, por primera vez el Estado busca profundizar los ejes de "memoria, verdad y justicia", y adelantó que trabajará para normalizar el organismo y garantizar una "situación equitativa" para los veteranos de todo el país.
Alonso fue nombrado esta semana por el decreto 639 con el objetivo central de normalizar la comisión, creada en 1994 por Carlos Menem e intervenida en 2004 por Néstor Kirchner.
"Con un nuevo criterio y un apoyo muy fuerte desde el Estado, la normalización de la comisión implica un avance, que se potencia con la política del Estado nacional de profundizar el eje de memoria, verdad y justicia en la cuestión Malvinas", explica Alonso en diálogo con Télam.
Entre los objetivos que perseguirá desde su nuevo puesto, el referente del centro de ex combatientes (CECIM) de La Plata dice que está "garantizar los derechos y beneficios para todos los veteranos y lograr una situación equitativa, que se potencia con la decisión política de que el Estado esté presente para atender a los que sufrieron la experiencia de la guerra".
Su nombramiento implica además un respaldo del gobierno a dos causas centrales que viene impulsando el CECIM: las denuncias de violaciones a los derechos humanos y torturas que sufrieron los soldados durante la guerra por parte de sus superiores, y la identificación de los cuerpos sepultados como NN en el cementerio de Darwin.
La nueva comisión estará conformada además por los veteranos Juan José Fernández, Carlos Martín Zini e Isidoro Abel Rausch y, en representación de los familiares caídos en combate, fue designada Norma Gómez, hermana de un caído chaqueño.
A través del decreto 542, de abril pasado, se dispusieron los nuevos objetivos de la comisión, que incluyen representar al Estado en relación con las distintas organizaciones que nucleen a ex combatientes civiles, recopilar y ordenar toda la información existente sobre programas de salud, empleo, vivienda, acción social; analizar la normativa vinculada con beneficios sociales; y organizar los viajes de familiares a las islas, entre otras cuestiones.
Además de los ex combatientes y del familiar, la comisión estará compuesta por representantes del PAMI, la ANSES, Cancillería, y los ministerios de Desarrollo Social, Trabajo, Educación, Salud e Interior.
"Se va a potenciar la coordinación de programas que beneficien el abordaje de cuestiones particulares y de situaciones de vulnerabilidad", explica Alonso, quien recuerda que -tras su creación en 1994- la comisión "fue desvirtuando lo que originariamente habíamos pedido los ex combatientes y se incorporó al personal militar".
"Ahora, con un nuevo criterio, la Presidenta retoma lo que originalmente venían pidiendo las organizaciones que nuclean a soldados conscriptos", destacó y agregó que "esta situación es la que tendríamos que haber tenido enseguida después de la guerra, pero recién ahora se logra".
Entre sus funciones, también estará contactar a los familiares de caídos; sobre todo, para asistirlos y explicarles la iniciativa de identificar los restos de los soldados enterrados en Malvinas como NN, que solicitó la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a la Cruz Roja Internacional el pasado 2 de abril.
En cuanto a las presentaciones judiciales por las torturas de soldados, Alonso destacó que en las últimas semanas sumaron su apoyo a esta causa -presentándose ante la Corte Suprema en carácter de `amicus curiae` (amigo del tribunal)- la agrupación Hijos, la AMIA, la DAIA, la provincia de Chaco y la Comisión de la provincia de Buenos Aires por la Memoria.
"El reclamo va sumando, porque hay una necesidad de la sociedad argentina de saber qué pasó con sus soldados en Malvinas", dijo.
Por último, sobre el spot grabado en las islas relacionado con los Juegos Olímpicos Londres 2012, Alonso reveló que dos integrantes del CECIM, Luis Aparicio y Sergio Isaías, fueron convocados hace un mes por la empresa de publicidad que lo produjo, Young & Rubicam, para pedirles su opinión.
"Es un mensaje muy claro, un homenaje a los caídos. Los que nos deberíamos sentir ofendidos somos los argentinos por el constante incumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas, por la instalación de una base militar en Malvinas, porque realizan ejercicios militares y por la explotación de nuestros recursos naturales", concluyó.
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